Mucho han cambiado las tornas en comparación con un año atrás. Se ha pasado de tener marcadores en contra, con hasta ocho y diez goles de diferencia, a meter veinte goles (y ni un solo tanto en contra) al colista, el Estrellas Alicante, el pasado fin de semana.
Un partido éste al que acudió bastante público, quizás animado por el potencial festival de goles que estaba por llegar. El encuentro no permitió mucho lucimiento, ya que el rival no daba el nivel para poner en práctica jugadas ensayadas, pero, sin embargo, sí que dio minutos a aquellas que no suelen salir tanto al campo.
Un rival encerrado
Sólo dos veces cruzó el Estrellas la mitad del campo, sin peligro ninguno. De hecho, la guardameta sólo tocó bola dos veces, ninguna con las manos. El juego fue limpio, porque, pese a que estaban encerradas en su área y no planteaban contras, se limitaron a defender de forma reglamentaria. La máxima goleadora fue Irene, con cuatro tantos.
Sin embargo, tal y como señala Marine, capitana del FC Bahía Santa Pola Femenino, “se fueron contentas por el mero hecho de aprender, ya que es su primera temporada como equipo. De hecho, comentamos al árbitro que si acortábamos el tiempo, pero ellas dijeron que no, que lo importante era aprender”.
A escalar posiciones
El próximo partido será contra el Benijófar, a domicilio, este sábado, a las 18.00 horas. La capitana destaca que se trata de un rival, a priori, asequible, pero que jugarán teniendo el factor campo como ventaja. A día de hoy, son cuartas en la liga y una potencial victoria puede colocarlas dentro del trío de cabeza. Recuerdan que sólo han perdido contra las primeras y segundas, los equipos más fuertes de todo el cuadro. Sin duda alguna, las chicas del Bahía tienen toda una temporada por delante para regalar al público alegrías.