La concejala de Urbanismo, Lola Gadea, ha desmentido rotundamente que la estructura del colegio Azorín de Santa Pola contenga materiales nocivos de fibrocemento, tal y como había denunciado Esquerra Unida.
La edil ha declarado que “no es cierto que exista en la estructura del colegio Azorín este tipo de material, hay un “acabado” sobre el forjado que es de uralita (fibrocemento)” y que, según el informe del técnico competente, únicamente sería nocivo para quien lo manipulara con herramientas para su corte, colocación, demolición o triturado.
Por tanto, Gadea Pide a Esquerra Unida que haga caso a las directrices que le ha marcado el AMPA del Colegio Azorín “en el sentido de que se informen bien antes de emitir juicios sin ninguna base y no mientan asegurando que es un elemento propio de la estructura”.
“En política no puede valer todo”, declara Gadea, “porque no es de recibo que EU genere un alarmismo infundado y manipule a los padres con mentiras, diciendo sin ningún fundamento que existe riesgo para los niños y los trabajadores del centro”. Desde el Ayuntamiento ya han informado a la comunidad escolar, “que ahora sí es consciente de la realidad y sabe que no existe ningún tipo de riesgo para los niños”.
En cubierta y bajantes
Por su parte Esquerra Unida ha matizado que el fibrocemento está presente en la cubierta de agua, así como en las bajantes de fecales que hay en el centro. Inciden en que “la única preocupación de nuestro grupo es el bienestar de los niños del colegio, así como de los trabajadores a la hora de manipularlo en caso de rotura”. Del mismo modo, solicitan al Ayuntamiento que, toda vez fuera de los meses lectivos, “retiren estos materiales que son perjudiciales, tal y como anunció la propia Consellería”