Van a ser las prisas, porque tendrían que fichar en algún sitio y llegaban tarde. O porque había peticiones masivas de dueños de locales hosteleros pidiendo terrazas. O comerciantes a las puertas del Ayuntamiento clamando que les lloviese un maná salvador en forma de Plan de Humanización. Va a ser eso, porque, de otra forma, es incomprensible la puesta en marcha de un experimento de tal calibre justo en el inicio de la temporada estival. Esa en la que es tan fácil aparcar, hay tan poco coche circulando y la gente no tiene prisa.
Hemos de felicitar, y felicitarnos, por no tener que lamentar coches estilo cuadrigas de Ben Hur. Pequeños alcances y algún que otro susto al doblar una esquina. Tal vez, sólo tal vez, un pequeño caos alguna que otra noche. Caos que obligó a cortar el tráfico en toda la zona centro hasta las tres de la madrugada. Caos que tuvieron que solventar los agentes de la Policía Local quienes, por cierto, tenían de información la justa y de personal la buena fe para apoyar a sólo cuatro personas dedicadas al acondicionamiento de la pintura y señalética. Pero no vamos a decir nada, que luego nos llaman agoreros o mentirosos.
De vuelta al ruedo, los vecinos de Santa Pola del Este preguntaban que cómo hacían para llegar al centro, que lo tenían difícil. Menuda vuelta. De hecho, hasta se pasaron por aquí. Nosotros les dijimos que cómo es que no se han enterado del cambio de circulación, si el Ayuntamiento lleva tres meses haciendo campañas de comunicación, ruedas de prensa, contraportadas con los planos y hasta postes informativos… ¡Ahí va! ¡Que va a ser que el Ayuntamiento no ha hecho nada de eso! Nuevamente, vamos a quedarnos callados que nos llaman mentirosos, destructores y nos azuzan a los perros de la guerra.
Una cosa más, y ya colgamos. Las ideas, los cambios, el avance siempre es positivo. No pasa nada, incluso, por probar y, si no funciona, volver a replantear. Pero las cosas sin consensuar, sin meditarlas dos o tres veces, nunca son buenas. Por nuestra parte, esperamos (sinceramente) que sea para bien.