En una iniciativa para conocer más sobre la historia de Santa Pola y sus habitantes, el Museo del Mar conjuntamente con la Concejalía de Cultura, comenzó a grabar en pandemia una serie de videos etnográficos llamados “Miradas al puerto”.
En él, la santapolera Rita Lloret, habla de como era su vida siendo una niña, de como se organizaban, y de como lograban salir adelante las familias no sólo con el aporte económico de los cabezas de familia, pescadores mayormente, sino también de las mujeres que, como podían, sacaban adelante a los hijos y al hogar, apoyándose mutuamente ya fuesen familia o vecinas y conocidas del pueblo.
“La mujer santapolera en la posguerra”
En los años 40 y 50 las santapoleras eran mujeres valientes que debían hacer muchos números para sacar adelante a la familia, algo que ha quedado reflejado gracias a Rita Lloret, de Santa Pola, que, en el video compartido por el «Museo del Mar», recuerda como el trapero de entonces, Amadeo, les cambiaba los restos de red por platos, latas de tomate y otros enseres necesarios para la casa y el día a día.
En la economía doméstica todo se reciclaba, recuerda Rita, y, algo que hoy en día se intenta recuperar por el cuidado del medio ambiente, por entonces era algo común en la vida cotidiana de la mujer santapolera, y, sobre todo, la ayuda mutua entre mujeres, que por entonces era muy necesaria para salir adelante.
Las rederas santapoleras eran capaces de levantarse a las 4 de la mañana para terminar los encargos que no podían retrasarse.
Anita, tía de Rita Lloret, coordinaba a las rederas. Todas se ayudaban entre sí para terminar a tiempo los encargos de redes y también, para hacerse compañía a la hora de realizar dichas tareas.
En el video Rita Lloret recuerda la dureza de los tiempos y como las mujeres afrontaban dicha dureza con fortaleza y saliendo adelante con los medios de los que disponían, pues, como dice Rita: “Era el tiempo que les había tocado vivir”, y así lo aceptaban sin rendirse, viviendo el día a día.
Aquí puede visualizar el video: