Que nadie haga planes para el 31 de mayo y el 1 de junio, pues aterriza la segunda edición del Festival Rock’N’Pola, que reunirá durante dos jornadas tanto a grupos de la comarca como diferentes talleres y actividades. Así, a partir de las cinco de la tarde del viernes y hasta las dos y media de la madrugada, junto con el sábado, de diez de la mañana hasta las dos y media de la madrugada, pasarán por las tablas del escenario hasta 13 grupos de música no sólo de Santa Pola, sino del resto de poblaciones colindantes. Y, lo mejor de todo esto, es que es completamente gratis.
En cuanto a las actividades, también gratuitas, podremos encontrar talleres, actividades infantiles, arte urbano, roller derby, break dance, fotografía, manga otaku y cortometrajes.
Una necesidad de los grupos
Durante la presentación del evento, Francisco Martín, edil de Juventud destacó la colaboración del Consistorio con la Asociación Barrock en la organización de este festival de verano. “Estamos encantados”, declaraba, “de que esta asociación autogestionada dé salida a la necesidad de muchos grupos de música de tener un espacio para el directo, para que se les escuche y para percibir el calor del público”. Ana Blasco, concejal de Fiestas, quería sumarse a las felicitaciones de su compañero, además de destacar que, desde su área, “todo son parabienes para las personas que están organizando este tipo de eventos, que ayudan a dinamizar la población fuera de la temporada alta”. Destacaba, además, que las reformas de El Palmeral han llevado a trasladar este festival al Polideportivo Paco Hernández, “lo que puede abrir todo un precedente en la utilización polivalente de este tipo de espacios”. Por su parte, Daniel Paraíso, presidente de la Asociación Barrock adelantaba que, de momento, “son tres las asociaciones que han confirmado su asistencia, entre ellas los Amigos del Sáhara Occidental, la Asociación Colibrí y Entre Pueblos”. Junto con la parte informativa, habrá también una participativa y didáctica a través de multitud de talleres como, por ejemplo, “el de pintar la música”.
Los cortos, en el festival
El aspecto audiovisual no está, en absoluto, descuidado . “Tendremos proyección de cortometrajes, especialmente entre las actuaciones de grupos, donde aprovecharemos para visualizar el trabajo, el impulso creativo de gente de toda la comarca”. La motivación, a parte del aspecto estético, cultural y artístico no es otra que “dar la oportunidad, el foro adecuado a aquellos que no se han atrevido o no han encontrado los cauces adecuados para realizar su proyección”, indicaba Daniel Paraíso.
Álvaro Pérez, tesorero de Barrock, desgranaba el plantel de grupos que tendrán la oportunidad de disfrutarse en directo. “Hay de todos los estilos, desde el rock más duro hasta el indie, el pop o el funky más ecléctrico. Todas las actuaciones comenzarán a partir de las ocho de la tarde y tendrán un tiempo más reducido sobre el escenario que el año anterior, para dar más movimiento”. Recordaba que esta edición está dedicada por entero a la memoria del batería, músico y gran impulsor de la cultura local Rafa ‘El Nene’.
Apuntaba que la filosofía de la asociación se basa en el voluntariado, pues “todo el trabajo organizativo, los grupos que aparecen, las personas que están detrás y delante, ninguna cobra absolutamente nada”. Contaba cómo arrancó la edición del año anterior “poniendo 300 euros de nuestros bolsillo y tirando para adelante con la ayuda de colaboradores, Ayuntamiento (que pone el personal del centro, el espacio físico y ha cedido algunas mesas), patrocinadores, etcétera. Al final, con un presupuesto de más de 4.000 euros, quedaron poco más de 500, que han ido a parar a la organización de esta edición”.
Temas propios
Todos los grupos, “de la zona”, tocarán “temas propios, aunque hay alguno que también tiene versiones”, señalaba Álvaro Pérez. “Preferimos que sea así, puesto que el objetivo es dotarles de medios dignos, buen escenario, buen sonido, para que se puedan promocionar y la gente los vaya conociendo”.
En cuanto a los precios que se presentarán en los distintos stands y barras a disposición del público asistente, “serán eminentemente populares”, declaraba Daniel Paraíso. “Queremos dar una oportunidad para que la gente salga de sus casas, poner un rayo de esperanza a la crisis. Que saquen a los chiquillos a hacer cosas diferentes, que los lleven a algún taller, escuchen buena música y se tomen una cerveza fresca por un precio módico”.
Preguntados sobre si han pensado, de cara al año que viene, cambiar la ubicación y tener una zona de acampada para los posibles asistentes, aseguraron que “lo hemos pensado, cómo no, pero nos gusta ir sobre seguro, paso a paso y siempre fortaleciendo lo que tenemos. Pero, por supuesto, ojalá”.