- Una decisión que se valora como “dolorosa pero responsable”, necesaria para cuadrar los presupuestos de 2024.

  El equipo de gobierno aprueba incrementar el Impuesto de Bienes Inmuebles, que no se actualizaba desde 2016.

  La tasa de recogida de basuras también subirá una media de 10 euros anuales para ir equiparándose al coste real del servicio.

Santa Pola, 8 de noviembre de 2023.- El Ayuntamiento de Santa Pola ha tomado una decisión considerada "dolorosa pero responsable" para enfrentar el desafío del creciente desequilibrio presupuestario. En una medida inusual, el equipo de gobierno ha aprobado un aumento del 20% en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), que permanecía sin cambios desde 2016, y una subida media de 10 euros anuales en la tasa de recogida de basuras.

La propuesta inicial del equipo de gobierno contemplaba un incremento del 28% en el IBI, pero una enmienda presentada por el Partido Popular redujo esta subida al 20.6%. Esto se traduce en un aumento del tipo impositivo del 0,663 al 0,80, implicando un aumento anual de entre 60 y 70 euros en el recibo medio de IBI para los ciudadanos.

El concejal de Hacienda, José Pedro Martínez, defendió la medida como un "ejercicio de responsabilidad y sentido común", necesario debido al aumento significativo en los costes del gasto corriente. Martínez señaló que la decisión se tomó tras considerar el incremento acumulado del IPC del 21.7% desde 2016 que estaba congelado y la necesidad de cuadrar los presupuestos municipales.

Además del aumento del IBI, la tasa de basuras también subirá un 20% a partir de 2024. Según Martínez, esta medida es necesaria para cumplir con la ley que establece que las tasas deben cubrir el costo real del servicio. A pesar del incremento, aún habrá un desfase de 1.9 millones de euros entre los costos del servicio y la recaudación de las tasas. Los ciudadanos pagarán aproximadamente 60 euros adicionales al año, lo que se traduce en unos 17 céntimos al día.

La alcaldesa, Loreto Serrano, recordó que en la legislatura anterior no se aumentaron los impuestos y se obtuvieron subvenciones para apoyar al comercio local. Sin embargo, enfatizó la necesidad de equilibrar los ingresos y los gastos para mantener la estabilidad financiera del municipio.

La medida fue aprobada con los votos a favor del grupo popular y el rechazo del resto de los partidos políticos. Además, se celebró un pleno extraordinario y urgente para delegar a SUMA el cobro de la tasa de residuos sólidos urbanos, aprobado por mayoría con dos votos en contra de Més Santa Pola. Martínez destacó que esta medida permitirá mejorar la eficiencia en el cobro y aumentar la recaudación, liberando al departamento municipal de Rentas para otras tareas.

Oposición

Los partidos de la oposición expresaron sus preocupaciones. El PSOE argumentó que deberían explorarse otras opciones para equilibrar el presupuesto, mientras que Més Santa Pola sugirió alternativas como la contribución de personas que visitan el área temporalmente y la imposición de tasas más altas para aquellos con múltiples viviendas. Vox, aunque celebró la reducción del aumento propuesto, mantuvo su filosofía de no aumentar impuestos.

El socialista David Fernández alegó que “somos conscientes de que no es una cuantía excesiva, entre 10 y 12 euros anuales, pero junto con el IBI ya hablamos de una presión fiscal más acuciante para las familias santapoleras”.

Més Santa Pola recordó que “se suma a la subida del 10% del año pasado y ahora la del IBI un 20%, la situación del pueblo es la misma y parece que ahora no hay que tener empatía”, según Anna Antón.

La portavoz de Vox Mireia Moya explicó que ”la ciudadanía lo está pasando mal no solo por esto, sino por el expolio fiscal del gobierno central, no me parece el momento de tensionar más a la gente”.