El Auditorio de la Diputación de Alicante (ADDA) acogió la celebración de la asamblea anual de la Federación Alicantina de Comercio (FACPYME), donde los socios aprobaron la candidatura a la Junta Directiva encabezada por Carlos Baño, nuevo presidente de FACPYME, teniendo como vicepresidenta 1ª a Pepa Garri, a su vez presidenta de la Asociación de Comerciantes de Santa Pola.
Pepa Garri, que regenta una herboristería en la calle Marqués de Molins en Santa Pola, ya formaba parte de la anterior Junta Directiva presidida por Antonio Sáez, que tras siete años al frente de FACPYME, ha deja paso a Carlos Baño, nombrando a Sáez presidente de Honor de la entidad. Al acto acudieron las autoridades locales, Loreto Serrano, alcaldesa y Nely Baile, concejal de Comercio.
Baño en su intervención lamentó que las ayudas al sector “no llegan” y, por lo tanto, el comercio “no aguanta más”. Pedirá en todos los municipios la bonificación del 90% del IBI para los locales de negocio, que se aplace el pago de tributos a final de año, bonificaciones de impuestos y exoneración fiscal para empresas y autónomos que no tienen actividad, así como ayudas directas para revitalizar el comercio en la provincia, que atraviesa “una grave situación derivada de la crisis provocada por la pandemia”. Del mismo modo, ha subrayado que es “urgente un plan específico de rescate de la Generalitat con ayudas directas antes de que más negocios se vean abocados al cierre, porque es incomprensible que nos hayamos quedado fuera de las ayudas del Plan Resistir”.
Por último, Carlos Baño ha garantizado por su parte “compromiso, ilusión, firmeza, determinación y mucho trabajo en la defensa de nuestros intereses” y ha añadido que “vamos a trabajar mano a mano con las administraciones, porque es el camino para revertir esta situación, pero vamos a ser también firmes en los compromisos y exigentes en las medidas”, con la conclusión de que “No estaríamos haciendo nuestro trabajo si no lo hiciéramos así”.
Entre los retos de la nueva directiva destacan los de “afrontar las consecuencias que ha provocado la pandemia derivada de la Covid-19” y, para ello, “impulsará un proceso de innovación y digitalización, al tiempo que potenciará la formación y la vertebración”.
