La Dirección General de Puertos, dependiente de la Conselleria de Infraestructuras, se ha hecho eco de las peticiones del Ayuntamiento de Santa Pola y ha decidido pavimentar la zona del frente litoral situada al final del nuevo paseo marítimo Adolfo Suárez. De esta forma, se mejora la seguridad para peatones y ciclistas en este punto del litoral santapolero.
Recordamos que las terrazas de los locales de ocio del paseo de la avenida Granada pudieron volver a colocarse la última Semana Santa y que el paseo marítimo Adolfo Suárez fue abierto al público antes del verano. No obstante, entre el paseo y la zona portuaria donde amarran las tabarqueras había una barrera, la marina seca que utilizaba la Conselleria para colocar los barcos que, por ejemplo, habían dejado de pagar los amarres. Ahora esta barrera se ha eliminado, aunque no totalmente, se ha abierto un pasillo frente al paseo marítimo, pero a ambos lados sigue habiendo un espacio donde se acumulan restos de barcos y materiales de obra.
En el nuevo pasillo recién pavimentado hay dos pequeñas zonas ajardinadas, con su correspondiente riego por goteo y sendos árboles. Además, en los laterales de este pasillo también se ha realizado la plantación de arbustos.
El paseo Adolfo Suárez es fruto de la colaboración entre la Administración y la iniciativa privada. Así ha sido la sociedad Paseo Miramar, integrada por el Club Náutico y la Marina Miramar, la encargada de costear las obras a cambio de la concesión administrativa de explotación de los locales de ocio. También ha sido esta sociedad, Paseo Miramar, la que ha sufragado las obras de pavimentación de este pasillo que conecta el nuevo paseo con la zona de las tabarqueras.
Club Náutico
Asimismo, para mejorar también la seguridad en la zona del Club Náutico también allí la Dirección General de Puertos ha permitido que se realice una pequeña actuación. Así, se ha creado una especie de acera, con hormigón en la zona que linda con Gran Playa y la calzada que hay que cruzar para dirigirse al Club Náutico y al nuevo paseo Adolfo Suárez. Así, los ciclistas y viandantes que transitaban por la zona se encontraban al llegar a este punto con una calzada sin acera y que resultaba muy peligrosa con la circulación de vehículos.