Santa Pola, 15/4/2024.- Ante el creciente problema de vertidos ilegales de residuos y enseres en la vía pública, la Concejalía de Limpieza de Santa Pola solicita la colaboración ciudadana para mantener la ciudad limpia y ordenada. Actualmente, el Ayuntamiento está renovando todos los contenedores de recogida selectiva, con motivo de la nueva contrata de limpieza que estará en vigor durante los próximos diez años.
Desde la concejalía se afirma que, aunque se mejoren los medios materiales y humanos, el problema persistirá si no se cuenta con la colaboración ciudadana. Con mejores o peores contenedores, sigue siendo un desafío combatir diariamente la actitud incívica de algunas personas que no respetan las normas básicas de convivencia. Declaran que es frustrante encontrar constantemente vertidos de residuos o enseres fuera de los contenedores, en descampados, en cualquier rincón de la vía pública e incluso en zonas protegidas.
Encarni Ramírez, la concejal de Limpieza, destacó la importancia de la colaboración ciudadana en la gestión de residuos: “Mi mayor sueño es tener un pueblo limpio y ejemplar para todos los que vivimos aquí y para quienes nos visitan. Con esa intención me levanto cada día a trabajar. Sé que en todos los barrios hay personas conscientes de la importancia de mantener limpio su entorno, buscando manchar lo menos posible, sabiendo que no es más limpio quien más limpia, sino quien menos ensucia”.
Ramírez lamenta que haya una minoría de vecinos a quienes “no les importa el bienestar, la limpieza o cualquier asunto que afecte a sus conciudadanos. Son seres egoístas que solo piensan en sus propios derechos y libertades, sin considerar los derechos y libertades de los demás”.
Los ciudadanos pueden utilizar el servicio de recogida de enseres contactando al número 686 801 323, ya sea por llamada o WhatsApp, para coordinar la retirada gratuita en la puerta de sus hogares. Este sistema facilita una correcta disposición de los residuos y evita la acumulación en lugares no autorizados. La Policía Local está vigilante y actúa ante la detección de vertidos ilegales. Los infractores identificados enfrentan multas severas, que pueden alcanzar los 1.500 euros, en un esfuerzo por disuadir comportamientos irresponsables y promover prácticas sostenibles.
Encarni Ramírez hace un llamado a la acción conjunta: “Jamás un pueblo estará limpio sin la implicación de políticos y ciudadanos. Mi compromiso es total. ¿Puedo contar con el de todos vosotros?”