El próximo 10 de septiembre se abren las aulas. Una realidad que ya es casi palpable, más si cabe cuando la publicidad ya nos recuerda la mítica y sempiterna frase de “la vuelta al cole”. Más de 200 alumnos del Colegio Vicenta Ruso lo harán en las aulas prefabricadas.
Loli Tomás, edil de Educación hace memoria. El pasado curso escolar, la antigua corporación del Partido Popular y el antiguo director territorial de Educación llegaron al acuerdo de “que el Ayuntamiento se encargaba de las obras de adecuación de la parcela municipal anexa al colegio de Gran Alacant y, por su parte, la Dirección Territorial, se comprometía a realizar la pista de recreo, los sombrajes y una puerta de acceso entre el centro educativo y su extensión”. El resultado es que “el Ayuntamiento ha cumplido su parte pero la actual Conselleria de Educación no sabe nada porque no se firmó un acuerdo formal por escrito”.
Así, ni pista, ni sombraje. Aunque sí puerta de acceso “porque la hemos hecho desde el Ayuntamiento viendo su necesidad en las fechas en las que estamos”. Momentáneamente, por tanto, y dado que Conselleria no tiene constancia del acuerdo, se volverá a negociar a quién corresponde realizar las obras que faltan, “y que son necesarias de cara a este curso escolar”.
Pese a todo, Tomás asegura que la calidad educativa “no se verá mermada” ni un ápice en las aulas prefabricadas aunque, señala, “desde luego que no son las condiciones más óptimas y adecuadas para los niños”.