Hay que tener cuajo. Mucho cuajo para comportarse como lo hace la alcaldesa y su equipo de Gobierno “ocupa” en el Ayuntamiento de Santa Pola y es que parece que no entienden el significado completo de palabras tan importantes como transparencia, libertad y democracia.
Para que todos los santapoleros conozcáis cuál es la realidad que vive el Partido Popular en la oposición, deciros que el nivel de transparencia actual en el equipo de gobierno es CERO. Hemos presentado alrededor de 90 peticiones de acceso a expedientes y preguntas (algunas repetidas porque no contestan) para controlar la tramitación de los mismos y ni se nos permite acceder para fiscalizarlos ni se nos contesta a las preguntas. Además, tenemos alrededor de 30 registros de entrada sobre cuestiones importantes relacionadas con la gestión diaria del municipio a las que tampoco se nos da respuesta. Y yo me pregunto, ¿se nos quiere ocultar información? ¿por qué hay información que la Sra. Alcaldesa y el resto de partidos nos ocultan? Es fácil suponer que algo tienen que esconder porque de cualquier otro modo todas estas cuestiones y peticiones ya estarían contestadas. Por lo tanto, tenemos un gobierno opaco que se niega a facilitarnos la información que necesitamos para ejercer nuestro derecho y nuestro deber de control como grupo en la oposición.
Y si hablamos de libertad y democracia la cosa se vuelve todavía más oscura y tensa. El conglomerado de partidos que tenemos como gobierno, en los plenos nos tasa los tiempos, nos quita la palabra cuando les apetece y ahora se han acostumbrado a echarnos cuando lo creen conveniente, incluso utilizando la fuerza de la policía local con tal de evitar contestar a nuestras preguntas o de escuchar en muchas ocasiones lo que no les apetece o no les gusta oír. Y yo me vuelvo a preguntar, ¿por qué tienen miedo de que hablemos? ¿por qué quieren amordazar y callar al partido que más respaldo tuvo y que ganó las elecciones? La realidad por triste que sea es que cada vez más los plenos en Santa Pola se asemejan a una dictadura en toda regla.
Me gustaría recordar que cuando gobernaba el Partido Popular en la pasada legislatura en nuestro pueblo, la oposición podía hablar todos los turnos que quisiera y tanto tiempo como hiciera falta sin poner barreras a la libertad de expresión ni a la libre opinión de cada uno. Sin miedo a la crítica ni miedo a contestar a todo aquello que se nos preguntara. Jamás se echó a nadie del pleno y mucho menos se utilizó a la Policía Local para hacerlo. Estas situaciones de tensión sólo han ocurrido mientras en Santa Pola ha gobernado el Partido Socialista en etapas y épocas diferentes. Así parece ser que es como entienden los partidos de izquierdas que deben utilizar el poder: para amedrantar, coaccionar, silenciar e imponer. Jamás un alcalde del Partido Popular paró un pleno para criticar una nota de prensa de la oposición, criticar al medio de comunicación que la había publicado y aprovechar dicho parón para contestar a la nota de prensa. En mi humilde opinión, una cacicada más de la Sra. Alcaldesa con la que demuestra que hace lo que quiere, cuando quiere y sin respetar nada ni a nadie, al más puro estilo venezolano.
Queremos libertad para hablar y queremos que se nos conteste y se nos deje acceder a los expedientes. Queremos que se nos respete como oposición porque nos votaron y representamos a 5.353 votantes, queremos que no se nos amordace y que no se ahogue la voz del partido al que más gente votó, queremos que no se nos insulte y queremos que la Alcaldesa, que Compromís, Izquierda Unida, Podemos y los dos tránsfugas que traicionaron a sus votantes dejen de utilizar nuestro Ayuntamiento como su cortijo.