Desde que nací estoy viniendo a veranear a Santa Pola. Ahora mis hijos me dicen que ya no veraneo en Santa Pola que lo que hago es invernar en Elche, tienen razón ya que paso ocho meses aquí y cuatro en mi pueblo.
En estos setenta años transcurridos creo tener suficiente conocimiento de esta ciudad, que considero mi segunda casa, para poder decir que para mi es un ejemplo a seguir, ya que ha sabido combinar el crecimiento con la conservación de las muchas cosas buenas que tenia Santa Pola.
Como tengo muchos amigos santapoleros y además suelo hablar con camareros, tenderos, verduleros y todos aquellas personas que me atienden cuando voy a la compra, he podido comprobar después de las últimas elecciones que existe un cabreo bastante generalizado de cómo se ha dado solución al tema de la elección de alcalde.
Casi todos suelen cargar las tintas contra los dos concejales de Ciudadanos que han desoído las instrucciones de su partido, convirtiéndose en tránsfugas, para unirse a un multipartito para desbancar al aspirante del PP.
Yo creo que tienen razón en lo que dicen, pero en mi opinión también son muy culpables el resto de partidos. Todos los líderes de los partidos que forman el multipartito no se cansan de repetir que ellos no buscan sillones ni frentes populares, que lo que buscan es sacar de las alcaldías a los corruptos.
Que yo sepa Santa Pola es una de las pocas ciudades en las que no ha habido ningún caso de corrupción, luego aquí lo único que ha primado es el reparto de sillones. Estas actuaciones a la larga suelen salir mal.