Único, bonito y diferenciador. Así define la edil de Turismo e Infraestructuras el mirador volado de Gran Alacant. “Un proyecto integrado en la adecuación de los carriles bici y las sendas de la Sierra de Santa Pola con el que se ha conseguido trazar rutas en varios niveles, todas ellas señalizadas, así como la adecuación y conexión de caminos que conectan el casco urbano de Santa Pola con Gran Alacant”.
Se trata de una pasarela de 70 metros de largo y un mirador con 35 metros de longitud, que dotará al Faro de Santa Pola de unas vistas únicas hacia la Bahía y la Isla de Tabarca. De hecho, sobre 8,5 metros de voladizo que sobresale de la propia sierra, podrá disfrutarse del paraje con una sobrecogedora sensación.
A este respecto, aclaraba Serrano que “en todo momento, se ha contado con el asesoramiento de la Conselleria de Medio Ambiente, quien ha indicado los criterios para la realización de los circuitos, así como la señalética que han de llevar”. El objetivo, aclaraba, “es conservar la Sierra en el mejor de los estados posibles. De ahí que no se permitan abrir rutas ciclistas aparte de las indicadas, así como sendas peatonales, según los requisitos de Conselleria”.
Ha sido complicado elegir un material que no exigiese mantenimiento y que presentase una elevada durabilidad, por ello, “el material elegido ha sido acero galvanizado, resistente a la oxidación, que ataca con contundencia por la elevada salinidad”.
Con respecto a la estética del mirador, Loreto Serrano aseveraba que “turísticamente, siempre hemos intentado diferenciarnos. Se trata de una propuesta singular y entiendo que pueda haber gente que no le guste, pero también hay público al que le encanta”. A este respecto, apuntaba que todo el proyecto se presentó a los diversos grupos municipales y que “se contó con su aprobación unánime”.
Continuando con la estética, se refería a los soportes de las indicaciones, “los cuales han sido también criticados, sin duda a la falta de información, además de a gustos estéticos”. El Ayuntamiento, explicaba, ha optado por un modelo que prácticamente no tiene mantenimiento y en el que “sólo habrá que sustituir los adhesivos cuando éstos se deterioren por culpa de las inclemencias del tiempo”.
Tres son los proyectos con los que se ha actuado sobre la Sierra, y “todos ellos han servido para limpiarla, adecuar y habilitar caminos, señalizar adecuadamente...”. No hay que olvidar la labor de limpieza, en la que en sólo la primera semana, “se retiraron hasta 14.000 kilos de escombros, basuras, enseres domésticos, etcétera”.
