Ignacio Soler, candidato de Ciudadanos Santa Pola a la Alcaldía, aseguraba que uno de los principales motivos para apoyar a su formación en las urnas es “acabar con el clientelismo político del señor Zaragoza”. Eso quiere decir, por ejemplo, bajar el número de asesores y cargos de confianza y, sobre todo, actuar sobre la ADL, “no podemos permitir que se acaben los recursos públicos repartiendo baronías”.
Para Soler, el principio del mérito y capacidad “se ha terminado. Si eres familia, afiliado o amigo tienes un puesto donde quieras. Quieren que nos quedemos como meros espectadores de estas tropelías”.
El cabeza de lista de Ciudadanos apuesta por la reestructuración del Ayuntamiento, “para bajar el gasto corriente, que está por encima del 60%”. Ve como fundamental un profundo “lavado de imagen del municipio; crear una beca de emprendedurismo, en lugar de malgastar 1.2 millones de euros en la ADL; eliminar las tasas abusivas y poner el dinero en manos de los empresarios para que contraten, que la empresa más grande no sea el Ayuntamiento”.