El Ayuntamiento de Santa Pola ha conseguido solucionar, provisionalmente, la cuestión del incremento de nuevos alumnos en el Colegio Vicenta Ruso de cara al año próximo. La medida consiste en la ubicación de las aulas prefabricadas necesarias en el solar contiguo al colegio, que es de titularidad municipal.

El acuerdo se alcanzó hace escasos días tras la reunión del alcalde, Miguel Zaragoza; el concejal de Educación, Tomás Martínez, y la directora del centro, María José López, junto a Pablo Ortega, director territorial de Educación. Ortega se trasladó a Santa Pola para ver in situ la situación de los niños y de las cuatro aulas prefabricadas que ya están instaladas en el recinto educativo, más la de aula-comedor.

Dos vías

Cabe recordar que Ortega ya se había reunido previamente con la Asociación de Madres y Padres de Alumnos para buscar una solución. Entonces las vías eran dos: “bien trasladar a los alumnos de Infantil a Santa Pola mediante transporte público, bien instalar aulas prefabricadas”, señaló el director territorial.

Posteriormente, Zaragoza y Martínez, atendieron al AMPA, en una reunión en la que se descartó la primera medida. Zaragoza se mostró rotundo: “la solución, bajo ningún concepto pasa por que los niños sean trasladados. La más viable es utilizar la parcela municipal”.

Tanto el alcalde como el concejal indicaron que lo más óptimo era ocupar el recinto contiguo al colegio para instalar en la parcela municipal las aulas necesarias.

Esta iniciativa del Ayuntamiento tiene una gran ventaja, ya que no se separará al cuerpo docente en distintos enclaves. “Nuestro único fin”, añadían, “es que los alumnos estén juntos, cómodos y reciban una educación de excelente calidad”. Por su parte, Ortega se comprometió a realizar un estudio técnico para acondicionar la parcela. De hecho, los técnicos de la Conselleria de Educación han evaluado las necesidades de espacio e infraestructuras durante las pasadas dos semanas.

Conectadas al centro

Las nuevas aulas estarán conectadas al centro mediante una puerta, para que los niños no tengan que salir al exterior. Las aulas, como las existentes, gozan de sistemas de calefacción, aire acondicionado y los medios para cubrir las necesidades educativas y pedagógicas.“Aunque algunos se empeñan en llamarlos barracones, son aulas que reúnen todos los requisitos de comfortabilidad y que gozan de todas las medidas educativas que se precisan”, abundaba Zaragoza.

En la visita de Ortega al centro, también se acordó realizar una mejora en el acceso a las aulas de Infantil (a ejecutar en verano) por la cual se dará mayor capacidad a la entrada y salida de padres y alumnos.