La segunda movilización convocada por la Asociación de Comerciantes el pasado viernes, 21 de julio, reunía a alrededor de 400 personas, según la organización. Así, silbato y altavoz en mano, el recorrido, que iba desde El Palmeral hasta la Glorieta, aglutinó a una parte considerable del tejido comercial de la localidad, más vecinos de la zona, bajo los lemas ‘Sin comercio, no hay ciudad. Sin vecinos, no hay ciudad’ y ‘Sí al diálogo, no a la imposición’, ante los efectos que está causando en el tejido comercial y vecinal el Plan de Humanización. Los comerciantes repiten convocatoria hoy viernes, a las 21.00 horas, con salida desde El Palmeral y realizando un recorrido por Elche, Marqués de Molins, Glorieta, Muelle y finalizando en el Ayuntamiento. Hacen un llamamiento, nuevamente, a la ciudadanía, para que apoyen sus reivindicaciones.

Quieren trabajar
Al llegar a La Glorieta, algunos miembros de la Asociación de Comerciantes cogían el altavoz para manifestar su desagrado contra el Plan de Humanización y para manifestar claramente que lo único que quieren “es trabajar”. “¿A quién se le ocurre que vengamos a un Ayuntamiento a enfrentarnos por razones políticas cuando lo único que queremos es trabajar?” preguntaba retóricamente uno de los asociados arrancando los aplausos de los asistentes, quien apostillaba: “Estamos hartos de hablar, hablar y hablar porque no nos hacen ni caso”, refiriéndose al posicionamiento del Ayuntamiento de mantener el Plan de Humanización.

Contra comercios y vecinos
Un Plan que, según la Asociación de Comerciantes, está afectando a comerciantes y vecinos. Por una parte, afirman que se está notando la pérdida de ventas y, por otra, que “los vecinos han perdido la calidad de vida que tenían porque no pueden ni llegar a la puerta de su casa a descargar la compra y, si lo hacen, los multan”. Además de la merma económica, los comerciantes afirman haber visto alteradas sus rutinas laborales: “los proveedores tienen que venir de 8 a 13 horas porque si vienen por la tarde, los multan”.

“manipuladores”
Al grito de “Manipulación. Menos vallas” por parte del público, tomaba la palabra la presidenta de la Asociación de Comerciantes, Pepa Garri, quien iniciaba su discurso afirmando que lo que quieren “es un pueblo limpio, seguro y moderno. Y estos señores del Ayuntamiento nos han llamado retrógrados y manipuladores. Pero los manipuladores son ellos”. Garri realizaba una comparativa entre comerciantes y políticos: “Estos señores estarán aquí durante un tiempo, pero la Asociación de Comerciantes lleva ya 21 años de trayectoria, con diferentes partidos políticos y con cualquiera hemos trabajado exactamente igual”.

“No estamos en contra”
La presidenta de la Asociación de Comerciantes explicaba de nuevo que “no estamos en contra para nada de la humanización, pero ésto, lo que es, es un plan de adecuación hacia la humanización y lo que pedimos es que lo reconsideren y que lo dejen para otra época porque ésto es un caos y una total improvisación”.
De hecho, Garri recordaba una de las reuniones con miembros de la Corporación municipal “en la que se nos garantizaba que no iba a haber vallas. ¿Ustedes ven aquí vallas?”, lo cual provocaba un largo “si” como respuesta del público.
Entre las reivindicaciones que volverán a sacar a la calle está la eliminación de vallas, que se realice un estudio socio-económico del Plan, que se permita el acceso a proveedores y que se tenga en cuenta tanto la opinión de los vecinos como de los veraneantes y comerciantes.