El pasado domingo, 15 de diciembre, se celebró la final del XXIV Campeonato Mundial de Balonmano Femenino, donde la selección española se enfrentó a la selección holandesa, perdiendo el partido 29 a 30 en un polémico minuto final.
En el combinado nacional estaba presente la santapolera Lara González, quien, junto con sus compañeras, se colgó una merecidísima medalla de plata, además de hacer historia en el balonmano femenino español al quedar subcampeonas en un mundial, mejorando la tercera posición conseguida en el Mundial de 2011.
Para animar tanto a la selección como a nuestra guerrera santapolera, la Concejalía de Deportes dispuso en la Casa de Cultura una pantalla para poder seguir la final durante la mañana, además de incitar a los locales de la villa a sintonizar el partido.
Tras la disputa de la final, el equipo nacional aterrizó el lunes en Madrid, donde fueron recibidas como verdaderas campeonas por casi ochocientos aficionados y medios de comunicación. Ya después del recibimiento en el aeropuerto, la expedición se dirigió a La Moncloa, donde el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, recibió a las Guerreras para felicitarlas por una histórica medalla de plata y por escribir una página tan importante en el deporte español.
Periódico Santa Pola pudo hablar con Lara González, que nos transmitió que jugar la final fue “increíble y un placer”, y, aunque tuvieron “un final amargo”, con el paso de las horas “íbamos valorando cada vez más lo que habíamos conseguido”, puesto que hasta que no llegaron a España no fueron conscientes de “toda la repercusión que hemos tenido, de todo el seguimiento, de todo lo que se ha movido”, y ahora se sienten “orgullosas y contentas por todo el trabajo conseguido”.