Las madres y padres de varios centros educativos que han estado recogiendo firmas a lo largo de esta semana en contra del Decreto de Plurilingüismo acudirán al Ayuntamiento, la mañana de hoy viernes, para presentarlas en el Registro Municipal. Las firmas van dirigidas al conseller de Educación y la Dirección Territorial de Educación de Alicante y a la alcaldesa, Yolanda Seva.
Aunque no han solicitado, de momento, una cita con la primera edil, sí que avanzan que acudirán al Pleno municipal, “para poder leer el manifiesto delante de toda la Corporación”, declara una de sus representantes. “Queremos que se nos escuche, porque consideramos que ha habido una auténtica imposición”.
Ha recogido firmas en los colegios Hispanidad, Cervantes, Virgen de Loreto y Portus, “no sabemos si se han sumado gente de Azorín o Joanot Martorell, porque han sido muchas las personas que nos han solicitado el formulario de firmas”. De hecho, éste puede encontrarse en numerosos establecimientos comerciales de la ciudad, desde estancos hasta bares, tiendas de ropa, copisterías, “nos están demandando hojas en todos lados”.
Incluso, en Ramón Cuesta, que es de línea valenciana, “también hay madres que nos han pedido hojas, porque consideran injusto que los padres no tengan la opción de elegir”.
Además, este grupo de madres y padres está informando a todas las guarderías, “o al menos a todas las que podemos, porque los padres que tienen que llevar a sus hijos al colegio el curso que viene no tienen ni tan siquiera opción de opinar”.
Son de la impresión de que este decreto se ha hecho “deprisa y corriendo. Sin contar con nadie. Nos hemos enterado que, toda vez que el consejo escolar decide la línea, los padres tienen siete días para reclamar. Pues bien, todos los colegios han informado de la opción escogida pasados esos siete días… y por petición de los padres que fueron”.
“Ya informaremos cuando Consellería dé el visto bueno”, es la respuesta que han recibido por parte de alguna dirección de centro, “ni una hoja voluntariamente, todo a través de quejas y quejas”. Ahora, a toro pasado, “los centros mantendrán reuniones con los padres para explicar el decreto. Antes de la votación, nada de nada”.
Consideran que “Consellería tiene miedo de que los padres se les echen encima, pues parece que han pasado una directiva de silencio absoluto”. Ponen un ejemplo acecido en un colegio de Elche, “donde los propios profesores pidieron una reunión para informarse del decreto y Consellería contestó que ya se enterarían el curso que viene, con las matriculaciones, que no hacía falta ni informar ni crear jaleo”.

Que nadie opine
Que no dé tiempo a nadie a opinar, que no se informe de manera adecuada o que “exista un interés por valencianizar la educación en zonas donde no somos valenciano-parlantes, por los motivos políticos que ellos consideren”, es, para los progenitores, “injusto. Un robo a mano armada de las escasas posibilidades que tenemos de elegir un modelo educativo”.
Repiten que no tienen nada en contra del valenciano, “queremos que se de la asignatura, no nos oponemos a que la estudien. Pero que no nos chantajeen con el inglés”.