Ana Martí Baile, profesora del IES Cap de l’Aljub, conoció en 2014 al maestro zen Thich Nhat Hanh, también conocido como “Thay” (maestro). Martin Luther King lo propuso para premio Nobel de La Paz y es que su lucha incansable como activista pacífico y ecologista no tiene parangón. De hecho, en 2015 recibió el premio del Vaticano “Pacem in Terris” por su compromiso de conciliar un puente sobre política y espiritualidad.

Sus proyectos giran en torno a una de las enseñanzas de Buddha, llamada “mindfulness”. En castellano no tenemos una palabra exacta pero, se suele traducir como plena atención o consciencia. En otras palabras: aprender a vivir en el aquí y en el ahora. Normalmente con nuestras vidas estresadas y ajetreadas así como con nuestras mentes obnubiladas por las expectativas de cómo deberían ser las cosas, no vivimos el presente con consciencia. Siempre nos acecha la sombra de un “debería”.

Escuelas despiertas
Thay piensa que una sociedad más feliz y respetuosa es posible. Y en esta línea, la educación es la herramienta clave para que pueda llevarse a cabo esta transformación de la sociedad. Para ello ha creado un movimiento internacional llamado “Escuelas Despiertas”. Es en este punto donde entran docente y alumnado del instituto santapolero. 
“A lo largo de estos años”, destaca la profesora, “nunca ha dejado de sorprenderme la respuesta tan positiva por parte de los adolescentes para practicar semanalmente. Normalmente, dedico 5 o 10 minutos una vez a la semana. Y, transcurrido un mes, ya son ellos quienes me recuerdan que ese día nos toca practicar la meditación...”, explica.

Beneficios casi innumerables
En relación a los beneficios, se podría afirmar que son casi innumerables. Diversas universidades de reconocido prestigi han llegado a la misma conclusión: “La práctica constante del mindfulness mejora el rendimiento académico. A mi alumnado y a mí no nos tienen que convencer con estadísticas, pues es algo que experimentamos en carne propia. Porque una mente en calma es más propicia para adquirir nuevos conocimientos. Por otro lado, se aprende, gradualmente, a gestionar mejor las emociones y la hiperactividad”.

Paralelamente, durante este curso se ha llevado a cabo un seminario de formación de mindfulness para el profesorado en el propio centro. Formación que se ha inscrito en el CEFIRE (Centro de Fomación e Innovación para el profesorado). Del mismo modo, también se cuenta con la ayuda del profesor de vipassana, Juan Carlos Giménez Linares. La respuesta de las participantes ha sido muy positiva. Por otro lado, destacar que el equipo directivo del centro ha apoyado este proyecto desde sus comienzos.

Más presente
Cada vez se oye más la palabra mindfulness en psicología, pedagogía, coaching, business y un largo etc. Sin embargo, el mindfulness no es algo que se obtenga con un título. Es la práctica de toda una vida. “Cuando observas a una monja o monje de Thay cómo camina, cómo come, cómo habla... sabes que su conocimiento de mindfulness no es teórico o intelectual, sino que está basado en su integración en su vida diaria”.

El alumnado de la docente del ÍES Cap de l’Aljub también han intentado llevar a la práctica esta valiosa enseñanza, en su quehacer diario del aula. “Por todo lo expuesto, quisiera felicitarles por lo bien que lo han hecho durante este curso 2018-19”, afirma Ana Martí Baile. Esta línea de trabajo se inscribe dentro del #ODS3 (Objetivos de Desarrollo Sostenible) de la ONU, a saber: Salud y Bienestar. #17ODSONU #ODS3SALUDYBIENESTAR