Duro ha sido el paso del primer temporal de mar y lluvia de lo que se prevé un invierno complicado por culpa de la ciclogénesis. De hecho, tal y como han apuntado los técnicos municipales, acompañando a la concejal de Playas, Mercedes Landa, “el temporal del lunes por la noche ha sido muy fuerte y sí que han sufrido bastante deterioro las playas de Santa Pola”.
Costes económicos
Los daños han azotado, sobre todo, a las infraestructuras que, recordaba Landa, “no pertenecen al Ayuntamiento, sino a la Agencia Valenciana de Turismo”. Ha habido, aproximadamente, 170 metros lineales de pasarelas desaparecidas “o tan deterioradas que serán difícilmente recuperables”. La estimación aproximada de la restitución de todas las pasarelas asciende a 3.000 euros.
En cuanto al material de infraestructura higiénica como lavapiés, estaciones de bombeo, tuberías y todo lo que conlleva el servicio de agua en las playas conllevará unos 2.000 euros de gasto el volver a ponerlo al día.
“Todo el coste de restitución de materiales será solicitado a la Agencia Valenciana de Turismo”, declaraba Landa, quien añadía que “esperemos que nos lo concedan para recuperar o si no, de cara al año que viene, en la encomienda (dotación anual) que tenemos con ellos que se tenga en cuenta y suban la cuantía, en el caso de que no lo repongan ahora mismo”.
Mano de obra
Eso a nivel de material, que se ha perdido mucho, al que hay que sumarle la mano de obra propia para paliar los desastres causados por este tipo de temporales, “con acciones como levantar los lavapiés para que las máquinas de la empresa concesionaria, en este caso Urbaser, para que puedan, toda vez recuperada la arena, restablecer los niveles previos al temporal”.
Posteriormente habrá que volver a ubicar estas instalaciones en el nivel correcto: “alrededor de cinco jornadas de cuatro operarios. Un trabajo laborioso, que también contará con la ayuda de equipos técnicos como retroexcavadoras”. El coste de todos los trabajos en contabilidad analítica ascendería a 7.400 euros, “coste que no se abonará, pues utilizaremos todos los medios propios del Ayuntamiento. Pero éste sería el coste de externalizar el servicio”.
Sin arena
El principal problema, apuntaba Mercedes Landa, es la gran pérdida de arena de nuestras playas, puesto que todo lo material se puede recuperar. “Medioambientalmente hablando es un gran problema y, en este caso, la zona más afectada son las tres calas de Santiago Bernabéu”. Algo que no es ninguna novedad, pues el año pasado, también por estas fechas, golpeó fuerte en esta área.
La solución a esto es altamente delicada, entre otras cosas porque todo lo que tiene que ver con reposición de arena depende del Servicio Provincial de Costas. “Nos pondremos en contacto con ellos para que, en la medida de lo posible, se inicien los trámites administrativos para reponer la arena perdida”.
Pero la perdida de arenales, máxime en zonas donde no son playas naturales, “no es un problema de Santa Pola, sino de muchísimos municipios costeros y, dadas las circunstancias, no hay arena, no hay recursos para poder rellenar las playas perdidas”.
Suerte del cribado
Tenemos la tremenda suerte en Santa Pola de que “aquí sí que se está realizando el cribado del alga de posidonia para recuperar arena. Intentaremos, de todos modos, que sea el Servicio Provincial de Costas quien se haga cargo tanto del transporte como del extendido, de no conseguir este elemento”.
Los técnicos apuntan que es el cribado lo que está salvando la recuperación de nuestras playas, “porque el dragado es una solución que se usaba antiguamente, en distintos puntos donde había yacimientos. Pero estos lugares han ido adquiriendo protección medioambiental, de modo que hace años que no se puede extraer”.
Otros puntos son frente a la isla de Tabarca, que también esta cerrada la opción no sólo por el coste, también por los permisos medioambientales “pues en el último temporal los técnicos de costas descartaban por completo el dragado”.
La singularidad de la villa es que, con el cribado, podemos llegar a recuperar las calas de Santiago Bernabéu que, afirmaban, “han perdido entre el 70 y el 80 por ciento de la arena”. Es de esperar que, un lapso de tres semanas, vuelva algo más del 50% del total, “del resto, nos olvidamos”.
En el resto de playas, Urbaser ha destinado equipos de refuerzo de limpieza y recogida en las zonas de la playa de Levante a Varadero y de Gran Playa a Tamarit. Se estima que serán necesarios quince días de trabajo, a jornada completa, para dejarlas en perfectas condiciones. Serán cuatro peones y cinco conductores, que se apoyarán en la maquinaria: pala cargadora, dos camiones y dos tractores.
