
Vicente Germán fue el pregonero de las pasadas Fiestas y nos cuenta cómo ha sido la experiencia. Le parece muy gratificante ser elegido, ya que uno no es elegido pregonero todos los días, teniendo que representar a tu pueblo, siempre lo he visto desde la parte técnica y esa vez la parte técnica y vivirlo en primera persona como protagonista. Para Vicente le da la sensación de que el primer pregón que se celebraba en la Glorieta fue muy atrevido, pero salió muy bien. Quiere agradecer al pueblo de Santa Pola, familiares, conocidos y no, a todo el mundo que le ha arropado dándole apoyo. Recibió muchas felicitaciones de que les había gustado mucho el Pregón, como el ver el Castillo en diferentes colores, el ser un espacio abierto, el cambiar un poco la dinámica. El pregón acabó casi a las 3 de la madrugada con un gran concierto de Black Nigth. Opina que “quizás por las características de este Pregón se le mete mucha presión al pregonero ya que se ha convertido este acto en uno de los mas importantes institucionales, la ciudadanía es la que valora, para unos habrá estado mejor y para otros les gustará menos, pero la gran mayoría han coincidido que la Glorieta es un sitio emblemático y abierto que cabe toda la gente, pudiendo verlo desde las ventanas, las terrazas de los establecimientos de hostelería, los niños y jóvenes jugando por la plaza”.