Los trabajos de desdoblamiento de la carretera de Santa Pola, en el tramo comprendido entre la Vereda de Sendres y Valverde, van a suponer un cambio sustancial en las condiciones que actualmente rigen la circulación vial en la zona, ya que se limitará la velocidad a 70km/h con carácter general, y a 40km/h en las rotondas. Además, el vial pasará a contar con cuatro carriles, dos por cada sentido, con lo que se facilitará a los vehículos las maniobras de adelantamiento.
Ambas medidas implican, de facto, un aumento significativo de la seguridad vial en la zona, y con ello se persigue una rebaja de las tasas de siniestralidad en una carretera por la que circulan más de 17.000 vehículos diarios. Actualmente, esta carretera está catalogada por la Generalitat como vial de elevado índice de accidentabilidad.
Además de mejorar la seguridad vial de la carretera y aumentar la capacidad de la vía, también se crearán itinerarios adecuados para el transporte ciclista y peatonal, y se mejorará la accesibilidad al transporte público al habilitarse paradas de autobús a lo largo del tramo de actuación, con cruces peatonales en la proximidad de las glorietas.
A lo largo del trazado se definirán diversas glorietas cerradas, coincidiendo en la mayoría de los casos con glorietas partidas existentes. La elección de las mismas responde a garantizar la conexión con las zonas residenciales (urbanizaciones de Valverde y Alzabares) y con los caminos locales principales. Para la separación de la zona de circulación de vehículos con las zonas de circulación de peatones y ciclistas, se ha escogido un bordillo discontinuo, de modo que la acera y el carril ciclo-peatonal quedarán al mismo nivel que la calzada y los arcenes.
Las obras ya han comenzado y tienen un plazo de ejecución de 12 meses, con una inversión de 2.022.558,14€ a cargo de la Generalitat Valenciana.
Visita a las obras
El Conseller de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad, Arcadi España, el alcalde de Elche, Carlos González y la alcaldesa de Santa Pola, Loreto Serrano, visitaron las obras de remodelación de la carretera Elche-Santa Pola que mejorará la vertebración del territorio entre ambos municipios.
En la visita estuvieron acompañados por las ediles ilicitanas de Movilidad Sostenible, Esther Díez, y de Urbanismo, Ana Arabid, así como por la concejala de Urbanismo de Santa Pola, Trini Ortiz, y de Parques y Jardines, Encarni Ramírez, quienes asistieron a las explicaciones técnicas de la obra.
Loreto Serrano, alcaldesa de Santa Pola
La alcaldesa no ha dudado en aprovechar la visita para tratar con el Conseller varios asuntos que son importantes para la villa marinera. Entre ellos la situación del puerto y la necesidad de mejorar su acondicionamiento, especialmente iluminación y arreglos del mobiliario urbano.
Además, también han tratado la problemática de los puestos de venta de pescado y la necesidad de que la Generalitat habilite al Ayuntamiento para la gestión y/o explotación de instalaciones portuarias y que se puedan regular actividades o servicios de interés general, ya sea mediante convenio, concesión o delegación y así dar continuidad a esta actividad que se realiza en el puerto de Santa Pola.
Serrano también le ha solicitado su colaboración para conseguir que desde el Ministerio de Fomento se mejoren los accesos de entrada al municipio en la Carretera N-332 tanto en Playa Lisa, Santa Pola como en Gran Alacant.
Carlos González, alcalde de Elche
El alcalde de Elche, Carlos González, destacó la importancia que para Elche tiene este nuevo vial asegurando que “es fundamental dentro de las relaciones de Elche con su entorno, y Santa Pola es un municipio vecino con el que tenemos una relación social, cultural y económica muy intensa, lo que significa que se realizan multitud de desplazamientos en el día a día, que crecen exponencialmente en los meses de verano”.
González dijo que esta carretera “es fundamental por lo que tiene que ver con la seguridad vial, porque tradicionalmente es una carretera con una altísima siniestralidad y estamos convencidos de que el modelo por el que se apuesta contribuirá de una forma decisiva a reducir la siniestralidad”, y destacó además “la apuesta por el transporte público y por otras formas de movilidad, como lo es el carril ciclo-peatonal, que consideramos fundamental”.
El desdoblamiento de este nuevo tramo de la carretera de Santa Pola forma parte del plan de actuaciones que el Ayuntamiento de Elche considera prioritario para mejorar las infraestructuras viarias y ganar en vertebración del territorio. El equipo de Gobierno considera también prioritarias la finalización de la Ronda Sur, la liberación del peaje de la segunda circunvalación Alicante-Valencia, la conexión directa de Elche Parque Empresarial con la A-70 y la conexión directa de la estación del AVE con el tramo de la A-70 entre Elche y Crevillente.
Conseller Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad
Por su parte, el Conseller Arcadi España destacó las ventajas que esta obra supone para la ciudadanía, como es el aumento de la capacidad del vial, que pasa de dos a cuatro carriles, el incremento de la seguridad vial, la incorporación del carril ciclo-peatonal y la mejora del transporte público. Este proyecto de reforma del vial Elx-Santa Pola aumentará la permeabilidad transversal de la carretera para el tráfico peatonal y, además, mejorará la accesibilidad al transporte público al habilitarse paradas de autobús a lo largo del tramo de actuación, con cruces peatonales en la proximidad de las glorietas.
El Conseller aseguró que “ya están en marcha la totalidad de los tramos de esta carretera que se encuentran dentro del término municipal de Elche, por un importe de 11 millones de euros”. España confirmó que “todos estos tramos se irán licitando a lo largo de esta legislatura” y dijo que este proyecto “da credibilidad a esa alianza que tiene la Generalitat Valenciana con el Ayuntamiento de Elche y ese compromiso por mejorar las infraestructuras con una mirada de futuro”.
