Como una gota más de agua de las que puede llevar en el pico un Colibrí para apagar un incendio –siguiendo la metáfora empleada por la presidenta de la entidad, Faby Miranda– es para la Asociación Colibrí el gesto que ha tenido con ellos La Senia y Ángel Cañas. Así, en la sede de la Senia se imparten desde hace tres años clases de sevillanas. El profesor es Ángel Cañas, quien enseña a bailar a los mayores de forma desinteresada. Este año participan unos 65 alumnos en dos grupos y sólo pagan una pequeña matrícula al principio del curso, en octubre.
“Siempre he hecho hincapié en ayudar a asociaciones pequeñas de Santa Pola que tienen dificultades para encontrar financiación”, indica Cañas. El 50 por ciento de lo ingresado con la matrícula es para la Senia y el 50 por ciento lo recibe una entidad. En esta ocasión le ha tocado el turno a la Asociación Colibrí de Esclerosis Múltiple. Por el momento han recibido 500 euros, pero al final del curso seguro que les entregan algo más al aumentar el número de alumnos.