El pasado día 1 de octubre, a las 21.50 horas, los agentes de la Policía Local han de personarse en un domicilio de la zona norte de la localidad, en un caso de disputa familiar. Los padres de la familia habrían llamado a los agentes del orden locales, “pues la hija estaba amenazando con pegar fuego a la vivienda con una botella llena de gasolina”.
La patrulla (que acudió junto a una dotación de la Guardia Civil) accedió a la vivienda y consiguió retirar el artilugio incendiario a la joven, nacida en el año 1997 y que no presentaba, en apariencia, ningún cuadro psicótico. Tras la detención de la joven, ésta fue puesta a disposición judicial.