Nuevo caso de un vehículo calcinado. Esta vez, el suceso tuvo lugar en la calle San Antonio, junto a la panadería Molina. Se trataba de un coche, marca BMW, con sólo siete años de antigüedad, por lo que la Policía Local ha abierto un investigación. Inicialmente, aseveran desde este cuerpo de seguridad, todo apunta a que se trata de un incendio provocado por causas mecánicas, aún no esclarecidas, pero las pesquisas llevadas a cabo permiten casi descartar un incendio provocado.
Preguntados los agentes del orden los motivos del mismo, aseveraron que “este tipo de casos se producen más en este cambio de tiempo. Es complejo el determinar las causas porque el aluminio del motor, con la potencia calorífica que tiene, se comba y eso queda en prácticamente nada”. Añadían que “no es que estemos viendo un incremento significativo de este tipo de sucesos, sino que el parque automovilístico es mayor y, por lo tanto, estadísticamente es más visible”. Todo ello, además, contando con el altísimo uso de redes sociales.