- El Ayuntamiento subraya el gran esfuerzo del personal del área en la atención durante la pandemia.

El departamento de Bienestar Social del Ayuntamiento de Santa Pola lamenta la tergiversación de datos y cifras que desde distintos grupos políticos se quiere hacer con algo tan sensible como los servicios sociales municipales.

La concejala del área, Gela Roche recuerda que “los datos que se desprenden del informe que cita Compromís son inexactos y totalmente descontextualizados, y además el presupuesto de 2020 es la prórroga del de 2019 que elaboraron Compromís y Partido Socialista. Por lo que resulta, cuanto menos esperpéntico, que sean ellos mismo los que critican su propio presupuesto”.

Roche añade que “los datos que ofrece el informe están descontextualizados en un año de pandemia, y además, no contempla las ayudas de Bienestar Social que hay que sumar a esas cantidades, procedentes de Generalitat Valenciana y Diputación de Alicante”.

En total, en 2020 al presupuesto prorrogado de la anterior administración local de PSOE y Compromís, hay que sumar todo el trabajo realizado desde Bienestar Social en ese año. Con 818 ayudas directas a alimentación y 119 a alimentación infantil solo entre marzo y junio durante el estado de alarma, con un presupuesto de 178 mil euros en ayudas de emergencias por el COVID.

En cuanto al servicio de dependencia durante el 2020 se llevaron a cabo 494 atenciones presenciales. Durante el estado de alarma se llevó a cabo un apoyo puntual, supervisión de compras de medicación y aseo personal de las personas mayores.

Desde el área de Bienestar social recuerdan que “los servicios sociales no se basan únicamente en prestaciones económicas, desde Santa Pola incidimos en la atención profesional a las personas, el acompañamiento y el seguimiento de todos los casos. Y en este sentido, el departamento se ha reforzado y aumentado el número de profesionales en 2021”.

La concejala de Bienestar Social destaca además que “a los problemas de los santapoleros durante la pandemia, hay que añadir la ausencia y la dejación de funciones del Estado y de la Generalitat Valenciana en muchos aspectos, que han tenido que ser cubiertos por los Ayuntamientos. Durante la pandemia Bienestar Social no ha dejado de trabajar. Quiero incidir en el retraso monumental que la Generalitat lleva en la resolución de la ley de dependencia y en la renta valenciana de inclusión, que afecta directamente a los ciudadanos”.