Resulta increíble que el Ayuntamiento permita que un tractor que se dedica a la limpieza de la playa se dedique a este menester durante toda la noche con el consiguiente ruido que significa.
Pero, para colmo, el camión, que limpia con un compresor los aseos públicos portátiles lo hace a las 5.30 de la mañana y la barredera que limpia la basura que deja el “cutre-mercadillo” lo hace a las 6 de la mañana.
Seguro que el o los responsables de este despropósito no viven cerca de la plaza Rodríguez de la Fuente. Eso sin contar los golpes del camión de la basura que acompaña a los vecinos durante todo el día.