Tras las Municipales de 2003 se producen en el PSOE Santa Pola una serie de tensiones que dan lugar al nombramiento de una nueva ejecutiva de la que se aparta a los críticos que cuestionan a la portavoz municipal. Tras una silenciosa retirada del primer plano de actualidad de antiguos militantes que en círculos privados denuncian la nula oposición que se está haciendo, la Ejecutiva designa a ésta para que encabece la candidatura a las Municipales de 2007 con una fuerte desaprobación de veteranos socialistas y en una asamblea con un tercio de la militancia, que no trasciende a la opinión pública.
En las Municipales de 2007 el PSOE con 3.342 votos ve disminuido en 10 puntos su porcentaje en las elecciones de la Municipales de 2003; en cambio, el PP incrementa un 50% sus votantes y neutraliza: la polémica y costosa obra del parking y la paralización de las obras de la piscina y del centro de salud, con una política municipal fundamentada en la presencia diaria en los medios de comunicación y del alcalde y concejales en las dependencias del Ayuntamiento.
Este año los resultados en las Municipales han sido de escándalo, el PSOE sigue en caída libre con 2.945 sufragios; todo lo conseguido se pierde de la noche a la mañana por la política que han llevado a cabo los dos últimos responsables de la secretaría general de la agrupación. Sin embargo, en las Autonómicas de ese mismo día el PSOE consigue 3.140 votos, pero lo que clama al cielo es que en las Generales de noviembre el Partido Socialista es respaldado por 3.504 votos a pesar de la crisis y de Zapatero (el tiempo le quitará este sanbenito y se le reconocerá su gran labor por consolidar e incrementar el Estado de Bienestar y las libertades y derechos individuales). El descalabro electoral y la falta de apoyos a los socialistas en la población queda fuera de toda duda.
Hoy los socialistas necesitamos ocupar el espacio a la izquierda que nunca debimos abandonar, renovar nuestras estructuras para que los militantes y simpatizantes se sientan orgullosos de ser socialista, recuperar la confianza de nuestro electorado y ejercer una oposición leal y un control diario de la gestión de los populares; por eso, ante el silencio oficial y la no convocatoria de espacios para manifestarnos, públicamente expreso que estamos esperando un gesto que no puede ser otro que el de la dimisión de la Ejecutiva aunque sólo sea por decoro, la constitución de una comisión gestora y la convocatoria de primarias con acceso sin trabas de todos los candidatos al censo.
Antonio Baile Rodríguez