Los jóvenes de hoy en día están más preocupados por consumir alcohol que por consumir cultura. Esto es una lacra para la sociedad, incluida la santapolera. ¿Qué futuro nos espera si las generaciones que deben levantar al país solo quieren levantar una copa?
Sinceramente, creo que la educación española y la santapolera deja mucho que desear en este aspecto. Pero esto no es solo culpa de los padres, sino que también lo es de los colegios y de los institutos que obligan a sus alumnos a leer libros que no son recomendables a esas edades. Si ya de por sí les cuesta coger un libro por mero placer, ¿con qué ganas van a leer ese ‘tocho’ al que les obligan en sus centros educativos?
Proporcionar material para su edad y para su manera de ver la vida es la clave. Así pues, una sociedad en la que está más preocupada de beber y de salir de fiesta cada fin de semana no puede ser el futuro del pueblo. Algo hay que hacer para evitarlo.