Ramón Pomares Piñol
 

¿ES FÁCIL SER CRISTIANO?

 
Viernes 13 de junio de 2014 0 comentarios
 

Recuerdo que unos amigos me salieron al encuentro diciéndome, a raíz de estos artículos: “Ramón, no te compliques la vida”. Yo lo he meditado y pienso: ¿Cristo se complicó la vida?
Otro punto que digo antes de tomar el tema: “qué daño me hace fingir pues al hacerlo me estoy engañando a mí mismo”, al final, sale la realidad (diría Reyes).
Ya está bien de jugar a ser cristiano, pues es algo muy difícil; el mismo Cristo lo dice: “sin mi nada podéis”.
Se escucha mucho: soy cristiano, pero en mí nadie manda. Cristo fundó una Iglesia para devolver al mundo los valores perdidos. Como dice el Señor Alcalde, que no conozco ni sé de qué partido es: en la Iglesia, caben todos, no hay partidos.
Llamó a doce hombres sencillos, cobardes, que caminaban con Cristo porque les daba categoría. Pero se les vio el plumero cuando Cristo fue crucificado. Lo primero que hizo cristo, y es lo primero que deberían hacer los obispos, es buscarlos y darles la fuerza del Espíritu que les llevó a un cambio total de vivir, de amar , de juzgar y se fueron por el mundo conocido a enseñar lo dicho por Cristo, que no sirve solo para bien morir, sino para bien vivir. La que armaron creando comunidades y casi todos perseguidos.
Los cristianos destacaban por su amor, porque no había ricos o pobres, por eso pienso: ¿es fácil ser cristiano? Esa es la misión de la Iglesia, no vivir del pasado. Ahora recuerdo la Navidad, ahora la Pasión, ahora bautizo, ahora comulgo por primera vez y luego, si te he visto, no me acuerdo.
Esa es la Iglesia que tenemos, por eso el Papa está hablando y viviendo a lo Cristo. Diciendo que hay que renovarse, que hay que volver a las fuentes. Creemos que está anticuado y es todo lo contrario, en la vida ordinaria, voy a poner algunos ejemplos:
Primero: Se dijo “ojo por ojo”, pero yo digo amaos que el amor es paciente, sereno, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta… cuántas guerras o divorcios se evitarían.
Segundo: “No matarás”. Se mata en la carretera, en las guerras y lloramos, pero ¿y esos 210.000 que se mataron en el seno materno?
Tercero: “No robarás, no mentirás”. Pongo un ejemplo. Pasas por delante de una financiera y en sus paredes de cristal te ofrecen los duros a peseta, pero entras y es lo contario: las pesetas a duro y gracias, encima. Respeto al empleado que tiene que actuar para conservar el puesto. El negocio es el negocio.
Cuarto: cuando vas a misa, qué fácil es decir “Señor ten piedad”, rezar el Padre Nuestro, dar la paz al que tienes al lado, pero, ¿se la darías al que te cae gordo? La predicación que te dan, ¿es diálogo o monólogo? Es fundamental para conocer los misterios de Cristo, ojo, no siempre ocurre así.
¿Quién tiene la culpa de este desconocimiento? La Biblia, hay que tener en cuenta que ya Cristo dijo que vendrían falsos profetas y te dirían que lo blanco es negro. En la Iglesia hay dos clases de personas: Los dobles de Cristo, es decir, los curas, obispos y los simples cristianos. Debido a una forma de enseñar, de vivir, de los primeros, no todos, así está el pueblo cristiano. El Papa bien lo está diciendo bien claro para que la Iglesia no se contente con ver a un millón en Roma con motivo de las canonizaciones pasadas. Yo no he ido nunca a Roma. La mayoría no tienen pleno conocimiento y esto es fingir, aparentar lo que no es.
Termino con lo que pasó el día 20 de mayo en el Vaticano. 18 mujeres, casadas con curas, pidieron al Papa Francisco por carta firmada por ellas, que el celibato fuese opcional, pues es pura Ley Eclesiástica, no mandato de Cristo. En España, como yo, somos unos 8.000. En todo el mundo, unos 150.000. Mientras, se cierran seminarios por falta de vocaciones de jóvenes que quieren ser sacerdotes.
Viendo que el 57% de los jóvenes están en el paro, si se abren estas puertas, ¿no habría más sacerdotes, se abrirían nuevamente los seminarios? Aquí no hay paro. Se evitarían escándalos, entre otros beneficios, pues ya tenemos bastante con la riqueza de la Iglesia. Sólo en templos, parroquias, hay unas 240.000 en todo el mundo. Yo mismo, con el pueblo de Matola/algoda y Aspe, le regalé dos templos, dos locales, dos casas para el cura, valoradas en 45 millones de pesetas. Todo pagado, aunque ahora, al no cumplir lo que me prometieron, a mis 76 años, no pueda terminar el mes.
Gracias a los pueblos citados, todo es fruto vuestro, pues el Obispado no dio ni una peseta y, conmigo, no han cumplido lo prometido. Pero ojo, la Iglesia tiene muchos y maravillosos santos, no son todos así.

 

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