cualquier tema. No tengo dudas de la anterior afirmación. Lo que evidentemente no es malo, así que no creo que doña Vicenta Jiménez, autora del escrito del pasado viernes se molestará porque yo le exprese mi particular visión de lo que ocurre en el Paseo Adolfo Suárez, lo de particular visión es literal, porque yo vivo en la avenida mencionada.
No disiento en que la jardinería de este Paseo de Adolfo Suárez está en un lamentable estado pero los motivos son diferentes. Yo desde mi terraza lo que observo es lo siguiente: Muchos niños corren y pisotean las plantas ante la presencia pasiva de los padres que miran para otro lado para no ver los destrozos que realizan los chavales. Ya sabemos que a los nenes actuales les afecta mucho regañarles porque se les crean traumas. En otras épocas mi padre o mi madre me daban una voz y eso bastaba para que me comportara correctamente y nunca he conocido lo que es un trauma. Así que papás consentidores un poco de responsabilidad ciudadana os vendrá bien y contribuirá a mejorar el aspecto de la villa y seguro que los niños estarán mejor educados.
Algunas más cosas veo desde mi terraza y es que algunos adultos, aunque no se si son los padres de los chavales anteriores u otras personas, se dedican a arrancar las plantas, meterlas en una bolsa de plástico y llevárselas a su casa. Pues, quisiera recordarles que en Santa Pola hay viveros y tiendas que por poco precio disponen de plantas muy bonitas y de paso no dejarán despojadas de las mismas a las zonas comunes de los ciudadanos de Santa Pola. Tampoco estaría mal, que el servicio de limpieza que le corresponda quitara los abundantes yerbajos, plásticos y otros desperdicios que hay entre las plantas.
Finalmente, quisiera decirle a Vicenta que en este paseo no hay apenas palmeras, yo he contado las mismas y solo hay nueve, siendo muy abundantes las washingtonias. En especial es el espigón de Marina Miramar hay muchas. Plantas baratas y no tan bellas como las palmeras, algo tacaños fueron los que las plantaron perdiendo belleza pero se ahorraron unos eurillos.