El Club Jóvenes Promesas Santa Pola termina hoy viernes su II Campus de Verano, al que han acudido 73 niños y jóvenes, con edades comprendidas entre los 4 y los 13 años (tanto niños como niñas). Las actividades se han desarrollado en Els Xiprerets, tanto en el campo de césped como en el pabellón, en la playa, a la que acudían un día por semana y a la piscina.
La última semana han tenido que cambiar de ubicación al Pereira por problemas en el césped de Xiprerets y, el lunes, acudieron los 73 al parque de atracciones local, “que fue abierto en exclusiva para nosotros”. El miércoles tuvo lugar la jornada cultural, con la visita del Acuario, el Barco Museo, el Museo Arqueológico y el Museo del Mar. Hoy viernes se cierra el II Campus con la fiesta del agua y entrega de diplomas, foto de recuerdo y, por la noche, cena de convivencia entre todos los niños y sus familias.

Diez monitores
A la entrega de trofeos, finalmente no podrá acudir la concejala de Deportes, Loli Tomás, por ser el último viernes de mes y tener el Pleno, “pero nos visitó esta misma semana y compartió unos momentos con nosotros”.
Para hacerse cargo de todos los participantes en esta actividad, el Club ha contado con la presencia de diez monitores, de los cuales ocho estaban entrenando al fútbol base del Elche. Desde la Junta Directiva del Jóvenes Promesas consideran que este campus no sólo ha supuesto una importante mejora en la calidad técnica de sus jugadores (alrededor del 50% de los jóvenes que han tomado parte), “también ha sido una gran oportunidad para que niños y niñas hagan no sólo deporte, sino que interioricen los valores de éste: convivencia, respeto, superación y esfuerzo”.