La vida festera de Josué Vidal Bernal comienza desde bien pequeño. Primero como músico, a la temprana edad de 8 años, tocando en los diferentes actos de las fiestas de Moros y Cristianos con la Colla El Freu y, posteriormente, con la banda Unión Musical Mare de Déu de Loreto. En el año 2004, se introdujo en el bando moro formando su primera filà; Al-Burayat, de la comparsa Beduinos. En el año 2007, se creó la filà Al-Bolic de la que forma parte desde el año 2017 y de la que se siente como si hubiese formado parte toda la vida.
A diferencia de la gran tristeza que inundó a todos los festeros cuando la Asociación de Moros y Cristianos decidió suspender las fiestas de este año debido a la emergencia sanitaria por el covid-19, Josué admite que sintió “tranquilidad, porque se había tomado la decisión correcta debido a la situación en la que nos encontrábamos”. Opina que este año será “distinto”, pero que tratará de adaptarse a las circunstancias.
Para Vidal, es un gran orgullo poder ser el representante de todas las comparsas moras. “Las fiestas no solo hay que disfrutarlas saliendo a beber y a comer. Considero que hay que ser partícipe de todos los actos festeros, e implicarse cada cual de la manera que pueda. Pero implicarse siempre”. Afirma que lo que más echará de menos este año será escuchar a las bandas de música sonar por el pueblo, juntarse con Al-Bolic (su filà) y todos los actos festeros. “En particular las embajadas, que era lo que más ilusión me hacía. Se preparan con mucho esfuerzo, y además, subir y bajar por la calle del Muelle con la banda de música es algo que siempre me ha encantado”.
Acorde a la normalidad tan anormal en la que la sociedad se encuentra sumida, Josué se encuentra de viaje por el norte de España, “aprovechando que no hay que preparar nada para las fiestas ni hay que hacer ensayos de última hora”. Añade que la semana grande del municipio, además, la pasará trabajando, y que no ha tenido constancia de la programación alternativa propuesta por las instituciones.
Sobre el pensamiento de cara a las fiestas del 2021, Josué afirma que “todavía es un poco pronto dada la situación para plantearse el año que viene, pero creo que este año puede ser bueno para mejorar”. Explica que, si hay que tomar medidas, “seguro que la Asociación lo hará de la mejor manera posible, mirando por el bienestar de los festeros y sin poner en riesgo a nadie”. Y añade: “De no ser así, estoy seguro que no darían el paso de celebrar las fiestas. Lo primordial en estas situaciones es la salud de las personas, y el bien común”. Asimismo, el Embajador opina que el hecho de que alguien se pueda contagiar por celebrar unas fiestas “me parece un riesgo innecesario y evitable”, por lo que apela en todo momento a la responsabilidad y a la cautela.