Una familia descubrió a los cachorros en una bolsa de plástico junto a la iglesia de Gran Alacant y avisó a la Policía Local, que identificó y denunció a la responsable. Los gatitos están a salvo con una madre nodriza y ya tienen adoptantes.

DAVID P.N. | 19/03/2025.– El pasado sábado, una familia que paseaba por los terrenos contiguos a la iglesia de Gran Alacant protagonizó un acto de rescate que ha ocasionado revuelo entre los vecinos. Al observar cómo una mujer arrojaba una bolsa cerrada al suelo y subía a su coche con aparente despreocupación, decidieron acercarse para amonestarla, creyendo que se trataba de basura. Sin embargo, al abrir la bolsa descubrieron seis gatitos recién nacidos, aún con vida y en peligro de morir asfixiados.

Llamada a la Policía Local

La familia, horrorizada, pidió explicaciones a la mujer, señalándole que existían otras alternativas más compasivas y legales antes de abandonar a las crías de forma tan drástica. Ella argumentó que en su urbanización había “demasiados gatos” y que un vecino le había recomendado que “los tirara allí”, donde supuestamente “alguien los recogería”. El matrimonio, sin embargo, rechaza esta explicación y vio claro el riesgo que corrían los felinos, pues la bolsa estaba completamente cerrada y arrojada entre matorrales, considerando que dejarlos allí a la intemperie equivalía a condenarlos a morir.

Ante la gravedad de los hechos, avisaron a la Policía Local, que por entonces no pudo personarse de inmediato por estar atendiendo otro aviso que les había llegado un minuto antes de un posible infarto en Gran Alacant también; sin embargo, los agentes más tarde se personaron en el lugar y se pusieron en contacto con la familia para recabar los datos y proceder a realizar las acciones pertinentes.

Identificación y denuncia

La familia había fotografiado tanto la matrícula como el vehículo en el que se marchó la mujer. De este modo, la Policía Local logró identificar a la responsable, contactando a su marido para formalizar la denuncia por abandono de animales en condiciones que ponían en grave peligro su supervivencia. La actuación se sustenta en la legislación y ordenanzas municipales contra el maltrato o abandono de animales domésticos.

Rescate coordinado

Aunque en el primer momento la Policía Local no pudo desplazarse por la emergencia sanitaria en curso, gestionó la intervención de “Zero Mascotas”, la empresa que presta el servicio municipal de recogida de animales. El operario mantuvo contacto en cuanto pudo, ya que se encontraba realizando otro servicio, con la familia que denunció los hechos, coordinando ellos mismos el cuidado de los felinos sin requerir la intervención de la empresa.

Apoyo ciudadano y final feliz

Mientras tanto, los propios rescatistas y algunos vecinos se volcaron en cuidar a los pequeños felinos: compraron leche específica y biberones, llegando a encontrar una madre nodriza que los aceptó y los está amamantando. Asimismo, el padre de familia, que trabaja en el aeropuerto, compartió la situación con sus compañeros en un grupo de mensajería de trabajo, logrando que, en pocos días, todas las crías tuvieran ya hogar de adopción para cuando cumplan las semanas necesarias y estén en condiciones óptimas de ser entregadas.

Reacción de la Policía Local

El jefe de la Policía Local de Santa Pola, quién se preocupó personalmente de este asunto y contactando directamente con la familia para explicarles la actuación policial, ha destacado su firme compromiso y el de toda la plantilla con la protección animal, recordando que en diversas ocasiones ellos mismos han llegado a adoptar animales abandonados y los han cuidado también a nivel personal a los que recogían hasta dar con sus dueños.

“Tenemos claro que nuestro deber es velar por la seguridad de todos, incluyendo el bienestar de los animales. Este tipo de actos incívicos son inaceptables y la sanción se ajusta a la normativa para prevenir más abandonos,” indicó el jefe de la Policía, José Miguel Zaragoza.